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En 1989, los ayuntamientos de Lepe, Aljaraque, Ayamonte, Cartaya, Isla Cristina, Moguer, Punta Umbría y San Juan del Puerto aunaron esfuerzos para modernizar sus infraestructuras de abastecimiento, saneamiento y depuración. Sus redes, obsoletas, eran incapaces de responder a la demanda cada vez mayor del turismo, fundamentalmente. Fue el nacimiento de la Mancomunidad de Aguas Costa de Huelva y, con ella, de su empresa pública de gestión, Giahsa.
La Mancomunidad y Giahsa han trazado en estos años de vida el vuelco de una zona de gran valor medioambiental, la costa de Huelva, que necesitaba adaptarse a nuevos retos agrícolas y turísticos.
Por su parte, la Mancomunidad de Aguas del Condado presentaba en sus inicios un funcionamiento autónomo del de los propios ayuntamientos. Nació como Agrupación Intermunicipal en 1980 y nueve años más tarde, en 1989, se constituye como Mancomunidad, fundada por los municipios de Almonte, Rociana y Bollullos, con la aprobación de los estatutos. Durante esta primera etapa, la presidencia era rotatoria. En 1991 se integran los restantes municipios que la conformaron hasta su disolución, en 2009: Almonte, Bollullos del Condado, Bonares, Chucena, Escacena del Campo, La Palma del Condado, Lucena del Puerto, Manzanilla, Niebla, Paterna del Campo, Rociana del Condado, Villalba del Alcor y Villarrasa.
La Mancomunidad de Servicios de la Provincia de Huelva (MAS), después de un complejo proceso administrativo que se prolongó por espacio de casi dos años, echó a andar legalmente el 1 de enero de 2010, con el respaldo de 69 municipios. En 2014 están integrados 65 de los 78 de la provincia de Huelva. En 2016, con la reincorporación de Gibraleón a la Mancomunidad, se suman 66 municipios. Tras la incorporación de La Zarza-Perrunal en 2019 y de San Juan del Puerto y Tharsis en 2023, son 69 los municipios integrados.
Los objetivos de Giahsa son la gestión de los servicios públicos encomendados por la Mancomunidad y la gestión técnica de los mismos con eficacia y eficiencia en la administración de los recursos comprometidos. La conjunción de la calidad en el servicio al menor coste posible es la base fundamental de su actuación, como método para lograr un sistema tarifario razonable y comparable para el nivel de servicios demandados por la Mancomunidad.